Presidente dominicano regresa tras asistir a Asamblea de la ONU

El presidente de República Dominicana, Luis Abinader, regresó hoy al país luego de participar esta semana en la 78 Asamblea General de las Naciones Unidas en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos.

Abinader habló el miércoles en el segmento de alto nivel, donde ante líderes mundiales de los países miembros expresó el compromiso de su país para construir un modelo de desarrollo humano inclusivo.

También llamó la atención sobre el alto costo del petróleo en el mercado internacional, en perjuicio de los países importadores.

En ese sentido, instó a discutir y a aprobar en esa Asamblea un mecanismo financiero que garantice la estabilidad de los precios a naciones de renta media y baja.

El presidente también dedicó gran parte de su intervención a la inestabilidad política y social que vive Haití, la que, dijo, puede convertirse en una amenaza para toda la región, así como a la tensión que viven las dos naciones fronterizas debido a la construcción por ciudadanos haitianos de un canal en el río Dajabón, que su Gobierno considera ilegal.

Durante su estancia de cinco días en Nueva York, el dignatario se entrevistó con el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, a quien reiteró su solicitud de redoblar los esfuerzos para el despliegue de una misión de seguridad en Haití.

También se reunió con el primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne, a quien manifestó el apoyo de República Dominicana a su país, en el que residen unos 15 mil dominicanos.

El lunes pasado participó en el Foro de Líderes Globales en la Universidad de Columbia.

En su discurso de este viernes en la ONU, el presidente de Haití, Ariel Henry, expresó que Puerto Príncipe opta por el diálogo dentro del respeto de los acuerdos firmados en el pasado (se refería al Tratado de Fronteras de 1929 en virtud del cual se fijaron los límites fronterizos entre los dos territorios.

Henry indicó que no se quiere crear ninguna situación que pudiera dividir a la República Dominicana de Haití debido a que ambas naciones comparten una frontera.

El río que llamamos Masacre es una fuente de fricción histórica entre Haití y la República Dominicana y nos invita a no volver a resucitar esas heridas ni crear otras, indicó.

La semana pasada el presidente Abinader dispuso el cierre total de la frontera con la vecina Haití hasta que ese país detenga la construcción de un canal en el río Dajabón o Masacre, que comparten las dos naciones.