¿Por qué el agua es la mejor bebida?

La hidratación es todavía un concepto que nos resulta más familiar referido a la piel que al organismo entero. Sin embargo, constituye un aspecto importante de la salud.

El agua resulta esencial para el funcionamiento de los sistemas fisiológicos y beberla en la cantidad, la frecuencia y la calidad adecuadas puede prevenir el desarrollo de numerosos trastornos comunes o graves.

El cansancio, la hipertensión, las molestias digestivas, los eccemas o las dificultades para concentrarse, entre otros problemas, pueden guardar relación con una hidratación insuficiente.

Pero, ¿basta con beber cualquier líquido para hidratarse? ¿Hay tipos de agua que resultan más hidratantes que otros? ¿La dieta desempeña algún papel en la hidratación? Las respuestas a estas y otras dudas pueden favorecer un salto adelante en el cuidado cotidiano de la salud.

Nos cuesta entender que somos sobre todo agua en movimiento, que ese es el terreno donde se producen las reacciones químicas necesarias para la vida.

Las células solo pueden sobrevivir cuando tienen suficiente agua en su interior y alrededor. Por eso el organismo está dotado de un increíble sistema de gestión del agua que controla las entradas y salidas de líquido, y que procura que cualquier deficiencia sea rápidamente compensada.