Cuba prevé crecer un 3% en 2023, pero seguirá aún por debajo de 2019

La Habana, Cuba (EFE).- La economía de Cuba va a crecer en 2022 un 2%, frente al 4% de la proyección gubernamental, y seguirá así un 8% por debajo de los niveles previos a la pandemia, informó este lunes ante el parlamento el ministro cubano de Economía y Planificación, Alejandro Gil.

En la primera jornada del décimo período de sesiones de la actual legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), Gil aseguró que 2022 fue «un año duro» y «difícil». El producto interno bruto (PIB) cubano creció un 1.3% en 2021.

Con respecto a 2019, el último ejercicio completo antes de la covid-19, las actividades primarias son actualmente un 32.8% menores, las secundarias son un 17.9% y las sociales se encuentran aún un 6.8% por debajo.

Gil aseguró además que en 2022 no se va «a concretar el crecimiento de las exportaciones» previsto y que los ingresos en divisa y en moneda nacional van a ser «inferiores al plan» para el ejercicio.

Asimismo, indicó que los ingresos por exportación de bienes (tabaco, ron y miel, principalmente) «prácticamente se han recuperado».

El turismo, segundo sector del PIB y segunda mayor fuente de divisas, tampoco va a lograr su objetivos, como ya reconoció el Gobierno, que espera 1.7 millones de turistas en todo el ejercicio frente a los 2.5 millones planificados.

Apuntó varias razones para explicar estos incumplimientos, centrándose principalmente en la inflación importada y la actual crisis energética que sufre el país.

El ministro indicó que se ha registrado un «incremento sin precedentes de los precios de las principales importaciones» del país, en referencia a alimentos y combustibles (Cuba importa el 80% de los bienes que consume).

Además, reconoció que el Sistema Energético Nacional (SEN) ha atravesado este año un período «muy difícil» por el encarecimiento del combustible.

Agregó Gil que, para no afectar excesivamente a la población con los apagones, se paralizaron de forma regular actividades económicas, de la industria a la agricultura, lo que a la larga perjudica a la ciudadanía porque hay menor producción y oferta, lo que atiza la escasez y la inflación.

El ministro reconoció asimismo que las medidas implementadas para estabilizar la economía «aún» no han logrado los efectos deseados, aunque están empezando a dar resultados.

Cuba sufre una grave crisis económica por la combinación de los efectos de la pandemia, el endurecimiento de las sanciones de EE.UU. y los errores en la política económica.

Esta situación se traduce en una profunda escasez de productos básicos (alimentos, medicinas, combustible), elevada inflación, dolarización parcial de la economía y frecuentes y prolongados apagones.