Optimízate, la clave de Igor Casanova para el éxito de las empresas
El empresario se define como una persona “cuadrada”, pero creativa, una combinación que lo ha impulsado
Con un sentido del humor contagioso, el empresario y fundador de “Optimízate”, metodología con la que ayuda a emprendedores a tener negocios rentables, Igor Casanova, no solo compartió con elCaribe su visión sobre el mundo de los negocios sino que también logró hacer de la conversación una experiencia amena y divertida.
Según Casanova: “La conceptualización del proyecto se inició en marzo del 2020, en plena pandemia”. En ese momento de crisis y con temor a perder su empleo, Casanova comenzó a buscar cursos y a formarse, reconoce que no quería quedarse sin recursos en un mundo incierto. “Ahí me empecé a formar”, dice, detallando que se capacitó primero como consultor de estrategia y luego como creador de contenido.
Comenzó a darles forma a sus experiencias y al conocimiento adquirido cuestionándose: “¿En qué soy bueno?” Ahí descubrió que tenía una habilidad natural para simplificar problemas complejos. “Cada vez que me enfrentaba a un desafío, encontraba respuestas adecuadas y fáciles”, confesó.
Se describió como una persona “sistemática”. “A pesar de ser cuadrado, como decimos los dominicanos, soy un ‘cuadrado’ creativo, que eso no pega (entre risas), pero sorprendentemente, esa es la combinación”. Explicó que poseía una gran habilidad en marketing, así como una sólida comprensión de los números, algo poco común en su campo: “Es raro ver una persona comercial que sepa mucho de marketing, pero que también sepa mucho de números”.
“Siempre acertaba en los números; siempre llegaba a la meta e iba bien en las campañas”. Esta capacidad le llevó a la conclusión de que podría compartir sus conocimientos. “Y entonces me dije, ¿y qué tal si enseñamos esto?”
Así, decidió iniciar su camino con una agencia digital con el propósito de brindar herramientas, reconociendo que era un campo en el que realmente triunfaba.
Como resultado, se enfocó en ofrecer “servicios de alto valor” con Optimízate. En cuanto al tiempo necesario para consolidar su metodología, Casanova señaló que “me tomó dos años” y, en agosto de 2022, logró materializar y saber cuál iba hacer el paso a paso.
Patrones repetitivos en los negocios
Al trabajar con algunas empresas se dio cuenta que tenían problemas de estructuras. “Tenían problemas organizativos. Estaban haciendo de todo en el negocio y no tenían tiempo para aplicar las estrategias”, dijo Casanova.
Primero tenía que entrar a la parte organizativa, para luego entrar en marketing. “Me sirvió de experiencia y me sirvió para generar algo que se llama ‘Product market fit’”, refiriéndose a la necesidad de que su idea y el mercado se alineen. Además, enfatizó: “Si tú no logras eso, no tienes un negocio”.
Emprender y no morir en el intento
Sobre los pasos iniciales que debe seguir un emprendedor para no fracasar en su intento, según la experiencia de Casanova, está en el desarrollar una mentalidad adecuada. Él expresa que, al inicio de su emprendimiento, no creía en la importancia de esta mentalidad, pensando que todos tenían la misma forma de pensar que él: “No, no cualquiera puede emprender”.
A medida que ha interactuado con diversas personas, Casanova ha observado que, a pesar de que han tenido un negocio exitoso que les genera “muchos millones de pesos”, muchos se sabotean a sí mismos con creencias limitantes como “no soy bueno” o “no puedo”. Esta mentalidad de escasez, arraigada por la sociedad, la escuela y la familia, es un obstáculo que puede llevar al fracaso. “Si tú no tienes esa mentalidad de éxito, al final tú mismo terminas saboteando tu negocio”, advirtió.
Una vez que un emprendedor ha trabajado en su mentalidad, el siguiente paso es adquirir fundamentos sólidos: “Tú tienes que tener la base”, en referencia a aquellos que operan de forma empírica sin entender el funcionamiento del negocio, la economía y las diferentes fases de este.
El alto costo de emprender
De acuerdo con Casanova, el emprendimiento ofrece la oportunidad de “maximizar tus dones”. Lo más valioso que ha obtenido de su experiencia es la “perspectiva de vida”. “Gracias al emprendimiento, ahora tengo el control de mi vida”. Sin embargo, advirtió que hay un alto costo asociado a este camino. Compartió que, al contemplar esta opción, algunas personas se dan cuenta de que no están dispuestas a asumirlo. Por eso, afirmó con certeza que “el emprendimiento no es para todo el mundo”.