Ruggs, exjugador de los Raiders, condenado a 3 años de prisión por accidente fatal

Henry Ruggs, exjugador de los Raiders de Las Vegas, fue sentenciado el miércoles a por lo menos tres años en una prisión del estado de Nevada, por matar a una mujer en un accidente automovilístico ocurrido en una calle de esta ciudad hace casi dos años.

«Me disculpo sinceramente», dijo el jugador, elegido en la primera ronda del draft, cuando se puso de pie para escuchar su sentencia en Las Vegas.

En mayo, se había declarado culpable de un delito grave por conducir bajo los efectos del alcohol a 156 millas (250 kilómetros) por hora. El deportista aceptó también su culpabilidad por un delito leve de causar una muerte con un vehículo, que conlleva una condena de seis meses de prisión, la cual se incorporará a su pena de entre tres y 10 años.

Ruggs, quien tiene ahora 24 años, fue dado de baja por los Raiders cuando estaba hospitalizado a raíz de la colisión e incendio ocurridos la madrugada del 2 de noviembre de 2021. El siniestro mató a Tina Tintor y a su perro Max, y dejó lesionada a Kiara Je’nai Kilgo-Washington, quien iba en el auto con Ruggs y es madre de su hija.

«No tengo excusas», dijo Ruggs, quien mencionó el dolor que el caso ha causado a su compañía, sus compañeros y a los seres queridos de Tintor.

El jugador afirmó que, cuando salga de la prisión, intentará dar consejo a otras personas «sobre los peligros de conducir a velocidades inseguras y de manejar cuando se ha bebido».

Un comunicado leído por David Strbac, primo de Tintor, incluyó citas de Mirjana Komazec, madre de la joven. La mujer expresó su pesar y recordó «cómo era abrazar a su hija».

«Sabemos que nunca más podremos besarla en la frente para decirle lo mucho que la amamos y lo absolutamente orgullosos que estamos de ella», añadió.

«Oramos para que Henry Ruggs sea bendecido con la oportunidad de ver cómo su hija crece para convertirse en la mujer asombrosa que puede ser», añade el comunicado de Komazec. «Y oramos para que este accidente terrible inspire un cambio positivo en el mundo. Oramos para que todos podamos entender la importancia de cuidar al otro, recordando que cada persona es el ser querido de otra».