Científico ucraniano cuenta los delfines muertos por la guerra

PRYMORSKE, UCRANIA.- Concentrado, mirando a lo lejos, Ivan Russev recorre parte de una playa del mar Negro en busca de un delfín varado. Este científico ucraniano lleva un registro de los efectos de la guerra en la fauna y la flora local desde el inicio de la invasión rusa.

Científicos adelantan una cifra de 5.000 de estos mamíferos muertos, un 2% de la población total del Mar Negro.

Ivan Russev es director científico del parque nacional de Lagunas de Tuzly, en el suroeste del país.

Cada día inspecciona el territorio controlado por el ejército en busca de delfines varados en la arena. El último registro de la zona en 2020 era de 250.000 ejemplares.

“Desde el comienzo de la guerra, hemos estado monitoreando nuevamente la situación y hemos documentado muchos delfines que se han encontrado en la orilla del mar. Por ejemplo, el año pasado, a lo largo de toda la costa de nuestro parque nacional, que tiene 44 kilómetros de largo, solo encallaron tres delfines. Ahora, en tan solo cinco kilómetros en los que se nos permite operar (desde que estalló la guerra), hemos encontrado ya 35 delfines”, dijo Ivan Roussev, director científico del parque nacional de Lagunas de Tuzly.

Es imposible saber exactamente cuántos delfines quedaron varados en otras partes de la reserva, ya que por temor a un desembarco ruso, el ejército ucraniano prohíbe el acceso a la mayor parte de la zona a los empleados del parque.

Pero el científico sospecha que la causa de la muerte de los delfines son los poderosos sonares utilizados por las buques de guerra y submarinos.

Roussev dijo además que “los sonares se utilizan en los submarinos y barcos de guerra, que pasaban mucho en esta parte del Mar Negro muy a menudo, todos los días, y tienen un impacto en el sistema acústico de los delfines. El delfín recibió un trauma acústico, que le provocó la pérdida de la vista y no poder funcionar correctamente, y murió”.

Los científicos rusos, que también han constatado la sobremortalidad de los delfines, aseguran que son víctimas de un morbillivirus, una causa de epidemias mortales frecuentes en los mamíferos marinos.

Varias muestras de los últimos ejemplares hallados en el parque serán analizadas en Alemania e Italia.

Pero la guerra tiene efectos en toda la flora y fauna de la zona. Múltiples bombardeos alcanzaron el parque nacional de Lagunas de Tuzly y quemaron 100 hectáreas de zonas protegidas.