Rusia intensifica ofensiva; el presidente polaco visita Kiev

Rusia intensificó el domingo su ofensiva en el este de Ucrania y el presidente polaco Andrzej Duda viajó a Kiev para apoyar las aspiraciones del país de sumarse a la Unión Europea, convirtiéndose en el primer gobernante extranjero en dirigirse al Parlamento ucraniano desde que comenzó la guerra.

Los legisladores ovacionaron de pie a Duda, quien les agradeció el honor de poder hablar “donde late el corazón de una Ucrania libre, independiente y democrática”. Duda dijo que, para poner fin al conflicto, Ucrania no necesita someterse a las condiciones que exige el presidente ruso Vladimir Putin.

“Desafortunadamente, en Europa también ha habido voces perturbadoras en tiempos recientes que exigen que Ucrania se doblegue a las demandas de Putin”, subrayó. “Quiero decirlo de manera muy clara: Sólo Ucrania tiene el derecho a decidir sobre su futuro. Sólo Ucrania tiene el derecho a decidir por sí misma”.

Esta fue la segunda visita de Duda a Kiev desde abril, y la llevó a cabo en un momento en que las fuerzas rusas y ucranianas combaten a lo largo de un frente de 551 kilómetros (342 millas) en la región industrial del este del país.

Después de declarar que ya controla totalmente un inmenso complejo acerero ubicado frente al mar que era el último reducto de la defensa en la ciudad portuaria de Mariúpol, Rusia lanzó ataques de misiles y artillería para ampliar el territorio que ha estado bajo control de separatistas respaldados por Moscú desde 2014 en la región del Donbás.

Con el fin de reforzar sus defensas, el Parlamento ucraniano votó el domingo para extender por tercera ocasión la ley marcial y la movilización de fuerzas armadas, medida que permanecerá en vigor hasta el 23 de agosto.

El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy ha pedido a la Unión Europea que expedite la solicitud de ingreso de su país al bloque de 27 naciones. La posible candidatura de Ucrania será sometida a discusión en una cumbre en Bruselas a finales de junio.

El secretario de Estado francés para Asuntos Europeos, Clément Beaune, declaró el domingo a Radio J que pasaría “mucho tiempo” antes de que Ucrania ingrese a la UE, tal vez hasta dos décadas.

“Tenemos que ser honestos», señaló. “Si usted dice que Ucrania ingresará a la UE en seis meses, o en un año o dos, miente”.

Pero Polonia está redoblando sus gestiones para persuadir a otros miembros de la UE que dudan sobre aceptar el ingreso de Ucrania al bloque. Zelenskyy dijo que la visita de Duda representaba una “unión histórica” entre Ucrania, que declaró su independencia de la Unión Soviética en 1991, y Polonia, que puso fin a su gobierno comunista dos años antes.

“Esta es una oportunidad realmente histórica de no perder una relación tan sólida, conformada a través de la sangre, a través de la agresión rusa”, dijo Zelenskyy. “Todo esto para no perder a nuestro Estado, para no perder a nuestro pueblo”.

Polonia ha acogido a millones de refugiados ucranianos y se ha convertido en una puerta para la ayuda humanitaria y armas de Occidente que van a Ucrania. También es un punto de tránsito para algunos combatientes extranjeros que se han ofrecido como voluntarios para combatir a las fuerzas rusas.

Duda le dio crédito a Estados Unidos y a su presidente Joe Biden por unir a Occidente en su apoyo a Ucrania e imponer sanciones contra Moscú.

“Kiev es el lugar desde donde uno ve claramente que necesitamos más de Estados Unidos en Europa, tanto en cuestión militar como en esta dimensión económica”, dijo Duda, un mandatario de derecha que claramente prefería al expresidente Donald Trump sobre Biden en las elecciones de 2020.

En el campo de batalla, aparentemente Rusia ha registrado avances lentos pero constantes en el Donbás durante los últimos días. Intensificó sus intentos por capturar Sievierodonetsk, la principal ciudad bajo control ucraniano en la provincia de Luhansk, que junto con la de Donetsk conforman el Donbás. Las fuerzas armadas ucranianas señalaron el domingo que los soldados rusos habían lanzado un ataque fallido contra Oleksandrivka, un poblado a las afueras de Sievierodonetsk.

Sievierodonetsk fue objeto de intensos ataques de artillería, y el gobernador de Luhansk, Serhii Haidai, dijo que los rusos “simplemente intentaban destruir intencionalmente la ciudad… enfocándose en quemar todo a su paso”.

Haidai dijo que Moscú concentraba tropas y armas en la zona para intentar tomar control de Luhansk, redirigiendo fuerzas desde Járkiv hacia el noroeste, de Mariúpol hacia el sur y desde territorio ruso.

El único hospital en operaciones de la ciudad cuenta con apenas tres médicos y suministros para 10 días, aseguró.

Las autoridades ucranianas han dicho poco desde que comenzó la guerra sobre el número de bajas de su país, pero Zelenskyy dijo en una conferencia de prensa el domingo que en el este del país de 50 a 100 combatientes ucranianos morían en los combates, aparentemente cada día.

En un reporte matutino, Rusia también señaló que se prepara para reanudar su ofensiva en Slovyansk, una ciudad de Donetsk donde se registraron intensos combates el mes pasado, después de que las tropas de Moscú se replegaron de Kiev.

En Enerhodar, una ciudad bajo control ruso a 281 kilómetros (174 millas) al noroeste de Mariúpol, una explosión el domingo en su residencia dejó herido al alcalde designado por Moscú, según reportes de agencias noticiosas ucranianas y rusas. La agencia ucraniana Unian dijo que “guerrilleros locales” plantaron una bomba que lesionó a Andrei Shevchuk, de 48 años, que vive cerca de la Planta Nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa.