Primo de Patricia Ascuasiati dice que esper una condena ejemplar” 

Alfau Ascuasiati, primo de la fallecida maestra de la danza Patricia Ascuasiati, calificó su muerte como una «tragedia» y espera que «la condena sea ejemplar, que la justicia actúe como debe actuar».

Al hablar brevemente con la prensa durante el velatorio en la funeraria Blandino desde la tarde de este viernes 11 de marzo, declaró: «Y que esas voces que claman por una prisión domiciliaria para Mary Louise Ventura no sean escuchadas, y que sea condenada por el crimen que cometió. Desde un principio quiso evadirlo con mentiras y eso fue un homicidio a sangre fría».

Continuó argumentando la posición que ha dado desde el inicio: «La misma Patricia, sabiendo que estaba mal herida porque le decía a Keila Contreras, la muchacha que fue testigo: ‘Se volvió loca, me quiso matar, me pasó el carro dos veces’, lo reiteró. Ella sabía que iba a terminar mal”.

Alfau Ascuasiati, en declaraciones a los medios que estaban en la Blandino, dio otros detalles de la supuesta discusión entre Mary Louise y Patricia.

«El problema vino por tres perros, que, aparentemente molestando, entorpeciendo, estaban metiéndose entre las piernas a Mary Louise que venía manejando». Dijo que ella venía conduciendo desde Montecristi.

Alfau alega que la bailarina conocía el funcionamiento del vehículo de Ascuasiati.

En el velatorio se encontraban los hermanos de la artista, su exesposo, el artista Franklin Soto, sus hijos y demás familiares.

Figuras lamentan partida

La exministra de Cultura, Carmen Heredia, el coreógrafo y amigo Carlos Veitía, así como el productor artístico Guillermo Cordero y la cantante Diomary la Mala resaltaron la calidad humana de la artista.

La gestora cultural Samanta Olivero, directora de Carnaval, no pudo ocultar su tristeza ante la partida de Ascuasiati. Ella llegó acompañada de una pequeña representación de personajes de la Unión Carnavalesca del Distrito Nacional (Ucadi). Aunque estaban caracterizados de tan alegres Robalagallina (incluyendo a un niño), Califé, Diablos cojuelos y Guloyas, las lágrimas y la pena de sus rostros fueron inevitables.

Samanta la calificó como una mujer trabajadora que representó el arte y la cultura.