Lío por cargo paraliza la Cruz Roja Dominicana
Un conflicto de intereses mantiene paralizadas las labores en la Cruz Roja Dominicana desde la muerte de su titular, Ligia Leroux, el pasado viernes, lo que obligó a las autoridades disponer vigilancia policial en la entrada de la sede de la entidad de socorro, ubicada en el ensanche Miraflores, en la capital.
Por un lado está el grupo encabezado por el primer vicepresidente, Julio Capellán, quien afirma que le corresponde dirigir la Cruz Roja, como ordenan los estatutos de la institución.
Dijo que el otro grupo lo encabezan Miguel Sanflores, Enrique Marchena y Elisa Paula, quienes se mantienen en el interior de la institución.
«Desde el viernes tomaron medidas que no les corresponde, entre ellas, la celebración de una asamblea para designar a un presidente externo, en violación a los estatutos», dijo Capellán a El Nacional.
Definió como “usurpación de funciones” las acciones tomadas por las personas antes citadas.
Reporteros de El Nacional intentaron esta mañana conversar con el otro grupo, pero ello no fue posible, debido a que la puerta estaba cerrada y no se permite la entrada al interior del lugar.
